viernes, 8 de noviembre de 2013

Colegios

ya entramos de pleno en temporada navideño, tras Halloween y Guy Fawkes Night anoche
Se llenan las tiendas de decoración y gangas para esta fiesta de luces, reuniones, cenas opíparas y regalos

Y los colegios se disponen a organizar su mayor evento recaudador, las ferias de Navidad, donde los alumnos preparan con ayuda de los padres cosas para vender - tarjetas de Navidad, decoraciones, juegos, comida etc etc.

Aquí son muy típicas y este año me encargo de coordinar yo la de St Joseph - y madre mía, menudo trabajo! menos mal que siempre hay gente muy dispuesta a meterse en estos "fregaos" (y debo decir que a pesar de todo el estrés que supone yo estoy más que encantada y ya mirando hacia la de Verano, masoquista que es una).




Esto me está permitiendo entrar en el mundo escolar y conocerlo más de cerca, y me admiro y maravillo de que existen colegios que envuelvan tanto a los padres en su funcionamiento, que ayuden en las clases, propongan temas y ayuden a desarrollarlos. Como asistentes educativos. Colegios que si ya en tiempo de bonanza hacen de la imaginación una herramienta de trabajo imprescindible, ni te cuento en épocas de crisis, cuando haciendo gala también de su estatus de escuelas "eco", o verdes, cuentan el papel que se gasta y hacen que cada profesora, o miembro del Consejo de Padres compren el que necesite - desde luego, se agudiza la imaginación, como en parte de ¿queremos juegos en la Feria de Navidad? niños del After School class prepararán cajas de zapatos como los cofres de los 3 Reyes donde se adivinará qué hay dentro y se podrá ganar un premio acertando 3; ¿queremos manualidades? una madre prepara velas y otra (menda) las decorará en casa para vender; comida hecha por familias de los alumnos, pasteles y botellas donadas para tómbolas







Esto me hace pensar que manda narices que con el potencial que hay en esos pequeños cerebros y en los de sus padres, los iluminados de turno en tiempos de crisis - entiéndase ministros de Educación y sus respectivos gobiernos - corten recursos. Si con poco hacemos tanto, qué gente podremos formar dando algo más. Mucho más, y por eso , qué importante es que en los gobiernos haya gente imaginativa y que haya trabajado en el sector, sinceramente.


Me siento orgullosa de cómo es St Joseph y de los padres que lo forman, de la buena reputación que tiene educativamente hablando, y todavía no he visto a mis hijos (y creo que ni los veré) cargados de libros y deberes; todavía no he visto un examen en "versión española"  (la que yo conozco, la antigua EGB, BUP y COU pero con tanto cambio estos años, madre mía, quién puede seguirlo).

Me siento orgullosa y admirada de ver que mis peques no están creciendo como yo, saben cosas que yo no sé (basta decir cómo estuvo el peque contándome qué es Guy Fawkes Night y preguntándome si en España había algo parecido, y por qué los chinos celebran el Año Nuevo con sobres rojos, y nosotros con uvas, y por qué existe Diwali y Hannukah  en diferentes meses y se celebra la "luz") y creo que me hace apreciar lo diferentes que son y no verlos como prolongación de su padre y mía. Y como gente que me puede enseñar cosas a mí, aunque nos llevemos treintaytantos años.

Se que en España hay colegios así, como el de mi ciberprofe favorita Carmen Lorigados, que me da un ánimo alucinante cuando me asombro de ver cómo se hacen las cosas aquí y ver cómo ella pelea y logra lo mismo en Madrid; o de profes en ciernes, como Henar Maroñas , que no para de formarse y buscar ideas y recursos.





Soy de aquellas personas a las que si les preguntan cómo fue su infancia y su vida en el "cole" responde con un resoplido, y a la que la palabra "colegio" le provoca sudores fríos y cuanto más lejos, mejor. Pero no quiero que mis hijos ni que ningún niño en general lo viva así o lo recuerde así. Creo que deberían dejarnos y nosotros presionar, para que realmente educar fuera cosa de docentes y familias. Teniendo en cuenta las obligaciones familiares y también los derechos infantiles (que no se tienen en cuenta y así vamos, "com cagalló per sèquia" que decía mi abuela, manga por hombro y alterados todos, sin cumplir ni la mitad de lo que deseamos).


Creo que el mundo escolar es estimulante rico, estresante, y con un sinfín de posibilidades, lástima que siempre que vienen mal dadas, quieran cargárselo. Y el trabajo de profesores que realmente tienen vocación y pasión por formar a nuestros niños.








*la segunda foto pertenece al blog de Our Lady and StJoseph Parish